No es un hotel, es un edificio viejo con deptos adecuados en las habitaciones con literas, nos cobraron más de lo convenido, según ellos eran impuestos que tenían que pagar todos los turistas, 9.50 euros por persona por noche, nunca nos dieron la habitación reservada, nos estuvieron cambiando del hotel, a otros, uno aceptable y el segundo de quinta, sin wifi, olía a caño, la cama chueca y con los resortes saltados, perdimos mucho tiempo en cada cambio (dos a tres horas), tenia incluido el desayuno y tampoco lo cumplieron, y nunca nos dieron una razón de nada. NO LO RECOMIENDO, MUY MALA EXPERIENCIA!